17 de noviembre de 2022
El microinversor es uno de los equipos más importantes dentro de todo el sistema de autogeneración y autoconsumo solar. Además de sus características técnicas, el microinversor reduce significativamente los riesgos de incendio en los paneles solares.
Cómo es comprensible, muchas personas temen que la instalación de paneles solares pueda incrementar los riesgos de incendio en sus hogares. Que exista la mínima posibilidad de que los paneles solares prendan fuego a sus tejados, es una preocupación más que razonable.
Sin embargo, esta preocupación está basada en una serie de supuestos que están muy alejados de la realidad. Adicionalmente, el riesgo de incendio está minimizado gracias a la acción del microinversor en el sistema.
Este equipo de funcionamiento sencillo es imprescindible en cualquier instalación fotovoltaica doméstica o comercial a fin de convertir la corriente continua en corriente alterna. Generalmente, se instala debajo de los paneles con la finalidad de transformar la energía transmitida a nuestros enchufes.
En este sentido, el microinversor actúa como un elemento de seguridad convirtiendo la energía captada por los paneles a un tipo de corriente más segura. Adicionalmente, estos equipos protegen a todo el sistema de sobrecargas o alteraciones que puedan comprometer la seguridad general.
Los microinversores se diseñan para instalarse a la intemperie y resisten eficazmente la acción de los elementos naturales como la lluvia o la humedad. Además, permiten minimizar el sobrecalentamiento del cableado u otros elementos del sistema de autogeneración de manera eficiente y confiable.
Veamos cómo el micro inversor es el elemento de protección contra incendios accidentales más importante en un sistema fotovoltaico. Igualmente, analizaremos algunas de las causas de incendios más frecuentes en los sistemas de autogeneración y cómo evitarlas.
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Para comprender la función de un microinversor, debemos analizar brevemente los tipos de corriente eléctrica que podemos consumir en nuestros hogares. En términos generales, existen dos tipos de corriente: la corriente continua (DC) y la corriente alterna (AC).
En España, así como en la mayoría de los países europeos utilizamos un tipo de corriente alterna de 220 voltios. corriente alterna (AC). La energía captada por los paneles solares es un tipo de corriente continua y necesita transformarse para su consumo.
Esta conversión o inversión de corriente garantiza que la energía que llega a nuestro hogar esté adaptada a nuestros equipos y sistemas de iluminación. Esta transformación se hace de manera permanente por parte del microinversor y es la mayor garantía de seguridad de todo el sistema.
Los micro inversores se conectan directamente a los paneles con la finalidad de transformar de forma inmediata la corriente capturada. Esta energía se transmite por un sistema de cableado a bancos de acumulación o directamente al hogar.
Del mismo modo, la inversión de corriente en el punto de captación permite eliminar el riesgo de sobrecargas o sobrecalentamiento del sistema. Estas son, usualmente, dos de las mayores causas de incendios en sistemas eléctricos en el mundo entero.
Sin el micro inversor, la corriente trasmitida desde los paneles hacia nuestros enchufes no tendría la estabilidad y seguridad de la corriente alterna. Esto podría aumentar significativamente los riesgos de daños permanentes en nuestros equipos e incluso aumentar las probabilidades de incendios.
Si hablamos con cualquier experto en protección y prevención de riesgos, nos dirá que no existen sistemas 100% seguros. Sin embargo, los sistemas de autogeneración y autoconsumo fotovoltaicos están dentro de los más seguros del mundo.
Gracias al microinversor y los equipos que regulan la intensidad, tensión y otros elementos eléctricos fundamentales, podemos contar con una energía limpia y muy segura. Aún así, existen riesgos de incendio que debemos considerar con la finalidad de prevenirlos y actuar en consecuencia.
Dentro de las estadísticas de incendios en hogares los paneles solares no tienen una incidencia superior a cualquier otro elemento constructivo. No obstante, según los expertos, la mala manipulación de elementos eléctricos como enchufes o fusibles es una de las 10 primeras causas de incendios domésticos.
En este contexto, uno de los mitos más difundidos es que los paneles pueden generar un efecto lupa sobre el tejado. Consecuentemente, según este mito, los rayos del sol concentrados pueden prender fuego a las losetas asfálticas, hojas secas u otros objetos.
La realidad es completamente contraria. Los paneles solares distribuyen la energía solar en su superficie mediante una serie de celdas que absorben esta energía y la transforman en electricidad. Las placas son 100% opacas en su parte inferior y en vez de aumentar la incidencia solar crean sombra, lo que refresca el tejado.
Otro mito muy frecuente es que los bancos de baterías pueden sobrecargarse, generar exceso de calor e incendiarse. Nuevamente, la realidad desdice este mito ya que gracias a los sistemas de seguridad, las baterías tienen una serie de mecanismos de protección adicionales.
Las instalaciones caseras, improvisadas o hechas por personas no especializadas carecen, muchas veces, de la protección adecuada. Es por ello que los expertos en seguridad recomiendan hacer siempre instalaciones de la mano de empresas especializadas.
Los estudios técnicos previos, la preparación del área de instalación y la utilización de equipos de seguridad como los microinversores garantiza la seguridad del sistema. La elección de materiales y equipos de la mayor calidad genera la protección ideal para tu hogar y oficina.
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