17 de marzo de 2023
Saber cuántos kWh consume una lavadora es una de las formas más inteligentes de ahorrar dinero en nuestro hogar. Elegir los horarios para lavar ropa y los programas de menor consumo nos ahorran mucho dinero.
El aumento de las tarifas eléctricas nos ha hecho analizar muchas de nuestras actividades cotidianas. Conocer cuántos kWh consume una lavadora es hoy en día una de las inquietudes más frecuentes en miles de hogares.
Dentro de todos los electrodomésticos de una casa promedio, la lavadora es una de las que más electricidad consume. Una lavadora normal consume entre 0.5 a 3.5 kWh por cada carga de lavado, pero este es un dato de depende el tipo de ciclo y si se lava en frío o en caliente. Si nos detenemos a pensar en esta máquina, nos daremos cuenta que es uno de los sistemas más potentes de nuestro hogar.
El potente motor de una lavadora necesita de mucha energía para funcionar y eso se ve reflejado inevitablemente, en la factura mensual. Una actividad tan habitual como hacer la colada, se transforma en una de las vías más directas de aumento en el pago de la energía.
Por esta razón, cada vez más consumidores han buscado entre los cajones para encontrar los manuales de usuario de sus lavadoras. Encontrar el programa de menor consumo y compaginarlo con las tarifas más bajas es una nueva actividad en miles de hogares.
Del mismo modo, muchos consumidores se han visto en la necesidad de tirar sus viejas y muy consumidoras lavadoras cambiándolas por nuevos modelos. Las nuevas tecnologías han producido equipos con menores necesidades de energía y con programas que optimizan el consumo eléctrico.
El día de hoy, vamos a analizar algunos puntos importantes sobre uno de los equipos domésticos más importantes y más usados en nuestros hogares. Veamos cuánto nos cuesta hacer la colada y cómo ahorrar más energía.
Como ya habrás notado, la decisión de hacer la colada a determinadas horas afecta directamente lo que pagas en la factura de la luz. Asimismo, usarla con mayor o menor frecuencia nos hará pagar más o menos luz en una relación directamente proporcional.
Junto a la calefacción y el aire acondicionado, la lavadora es uno de los electrodomésticos más consumidores de energía. Por esta razón, la elección del modelo, la calidad y cantidad de programas, la certificación de consumo y el tipo de lavadora influyen en el consumo típico.
El consumo de energía de una lavadora depende de varios elementos que se suman para determinar su eficiencia energética. El año de fabricación del modelo influye en la eficiencia energética, pues hasta hace menos de 10 años, este no era un valor tan importante para los fabricantes.
Asimismo, la capacidad de carga de ropa, los ciclos de lavado y la temperatura del agua utilizada, son factores de gran importancia. Las lavadoras que usan ciclos de agua caliente, centrifugados no excluibles o vapor, son por lo general las que más consumen.
En términos generales, una lavadora típica consume entre 0.5 a 3.5 kWh por cada carga de lavado. Usualmente, la mayoría de las lavadoras tienen ciclos de lavado que oscilan entre 15 minutos y 90 minutos por carga.
Si suponemos que una lavadora tarda una hora en completar un ciclo, podríamos inferir que el consumo rondaría los 0.5 a 2.5 kWh por hora. Pero, hoy en día existen equipos que aprovechan mejor la energía con la inclusión de ciclos ECO que optimizan la electricidad y el agua consumida.
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Todos los especialistas en uso y ahorro de energía coinciden en que usar la lavadora en frío reduce significativamente el consumo eléctrico. ¿Por qué? Por una razón muy simple, el sistema que usa el equipo para calentar el agua se lleva buena parte de la energía necesaria para el funcionamiento de la lavadora.
Una lavadora que usa agua por encima de los 40ºC necesita una gran cantidad de energía para calentar el agua de manera muy acelerada. Este proceso, por lo general, se hace usando resistencias que necesitan un alto voltaje y amperaje para calentarse en pocos segundos.
Por lo tanto, usar ciclos de agua caliente como a 60 o 90ºC requiere de una mayor cantidad de kWh y por ende, aumenta el gasto eléctrico. A la larga, estas fracciones de energía usada en cada colada suma euros a la factura final.
La mejor solución es elegir ciclos cortos y preferiblemente, con agua fría. En promedio, una lavadora de carga frontal con diseño de alta eficiencia en modo de lavado en frío, consume aproximadamente 0,5-1,5 kWh por ciclo.
Obviamente, este consumo es un estimado general y que varía significativamente entre marcas y modelos.
Por el contrario, un ciclo de lavado en caliente puede requerir entre 1,5 y 3,0 kWh, lo que es más o menos el triple del consumo en frío. Esta información es fundamental a la hora de elegir el ciclo de lavado de nuestro hogar.
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